¿Sabías que una persona alta y musculosa puede llegar a pesar lo mismo que una persona obesa de misma estatura?
Sucede que, aunque la grasa y el músculo pesen lo mismo, difieren en cómo se ven y en su funcionamiento.
¿Qué es masa muscular?
Es la cantidad de tejido blando desarrollado por fibras musculares. Constituye el 40% del peso total del ser humano y cumple funciones como proveer estabilidad articular, aportar calor al cuerpo, mantener la postura, entre otros.
¿Qué es grasa corporal?
Es un tejido compuesto por células adiposas. Dichas células se encargan de almacenar la gran cantidad de grasa necesaria para proteger los órganos, cubrir las articulaciones, controlar la temperatura y almacenar vitaminas, en síntesis, para que el cuerpo funcione correctamente.
¿Qué diferencias tiene la grasa de la masa?
Existe la idea errónea de que, al realizar ejercicio, la grasa se convierte en masa muscular, pero nada más lejos de la realidad, pues sus características son muy distintas una de la otra.
- Volumen:
El espacio que ocupa la grasa es mucho mayor a la que ocupa un músculo. Esto se debe a que la densidad de la grasa es menor (pesa menos que el músculo), por ello dos personas con la misma estatura pueden pesar lo mismo; no obstante, una de ella deba usar una talla más grande de ropa.
Por lo tanto, si comparamos dos porciones de grasa y músculo, esto es lo que obtendremos:
1 litro de músculo cuya densidad es de 1.1g / ml pesa 1,06 kg (2,3 libras)
Mientras que,
1 litro de grasa cuya densidad es de 0.9 g / ml pesa 0,9 kg (1,98 libras)
- Energía requerida:
La masa muscular metabólicamente es más activa que la grasa. Es decir, mientras el cuerpo está en reposo, los músculos pueden quemar más calorías por día que la grasa corporal.
En proporción por hora, una libra (453g) de grasa quema 1.2 calorías y una libra músculo quema 6.5 calorías.
- Ganancia o aumento en el cuerpo:
Si bien es cierto que, en ambos casos, el aumento generado en el cuerpo, está relacionado con el alimento ingerido y gasto calórico, con respecto a la masa corporal, existe un tercer factor.
Se trata de las tensiones impuestas sobre el músculo. En otras palabras, el músculo reacciona cuando se realizan actividades físicas que generan una tensión diaria mayor a la acostumbrada.
Por otro lado, la grasa, sencillamente aumenta cuando se consumen más calorías de las que puede procesar el organismo; aun cuando sean proteínas o carbohidratos, el cuerpo almacena el exceso en forma de grasa.
Prepara un plan adaptado a tus necesidades
Ahora que sabes la diferencia, te resultará más fácil crear un plan para adelgazar esos kilos de más, sin decirle adiós a tu preciada masa muscular. Para ello te recomendamos:
- Incluir en la dieta, alimentos bajos en grasa.
- Evitar el azúcar refinado y el alcohol.
- Realiza ejercicios aeróbicos y ejercitar tus músculos.
- Procurar disminuir menos de 1% del peso corporal por semana.
- Y crear un plan de alimentación basado en un cálculo de tasa metabólica basal, si no sabes cómo hacerlo, nosotros con gusto te explicaremos.